Es importante antes de iniciar este proceso de reformar una casa tener en claro las necesidades y gustos del propietario para poder planificar adecuadamente el proyecto y evitar posibles imprevistos. Contar con la ayuda de profesionales en este tipo de proyectos como arquitectos de interiores o diseñadores puede simplificar mucho el proceso. Adicionalmente, la reforma puede hacerse de manera integral, es decir, se realizan cambios en todos los espacios de la vivienda; o por fases, en donde los cambios se hacen de manera progresiva en diferentes áreas de la casa.
La objetivo principal de una reforma de casa es lograr una vivienda funcional, actualizada y acorde al estilo y preferencias del propietario. Al lograr este objetivo se espera mejorar la calidad de vida en el hogar, aumentar su valor de mercado, y adaptarla a las nuevas necesidades de la familia. Una reforma de casa correctamente planificada y ejecutada puede engrandecer el ambiente y la utilidad de la vivienda, además de establecer las bases para futuras renovaciones y actualizaciones.
Primeros Pasos para Iniciar una Reforma de Casa
Para iniciar una reforma de casa de manera acertada, es fundamental seguir un conjunto de pasos ordenados. En primer lugar, es necesario solicitar presupuestos a profesionales de la construcción, esto nos proporcionará una idea más clara del coste de la reforma integral. Seguidamente, debemos analizar nuestras necesidades y expectativas, y después, debemos plasmar estos deseos en un croquis que nos ayude a visualizar cómo quedarán los espacios reformados.
Renovar las instalaciones eléctricas es otro paso esencial en este proceso. En la mayoría de casos, las instalaciones eléctricas de una casa suelen ser antiguas y no están adecuadas a los requisitos actuales. La modernización de estas instalaciones no solo garantizará un mejor funcionamiento y mayor seguridad, sino que también conlleva un menor consumo eléctrico y ahorro en la facturación. Además, este tipo de reforma puede revalorizar significativamente el precio de la vivienda.
Otro paso relevante es hacer los cambios pertinentes en el exterior de la casa. Esto incluye cambios de distribución, cerramientos de terraza, falsos techos, alicatado y suelos. Recuerda que estos cambios deben hacerse antes de pintar las paredes y colocar las puertas, ya que podrían causar daños en la nueva pintura.
Finalmente, llegarán dos etapas clave: la elección y colocación del mobiliario de la casa, y la instalación de los pequeños detalles de decoración, como cortinas, lámparas y alfombras. Es fundamental recordar que estos elementos decorativos deben instalarse una vez finalizada la reforma, con el objetivo de evitar cualquier tipo de daño en las paredes.
Consideraciones importantes antes de comenzar una reforma de casa
Cuando estés a punto de iniciar la reforma de tu vivienda, hay varios aspectos que debes tener en cuenta. Primero, deberías preguntarte qué es lo que necesitas exactamente. ¿Cuántas habitaciones necesitas, por ejemplo? O quizás, te des cuenta de que necesitas más espacio de almacenamiento. Establecer prioridades te ayudará a planificar mejor la reforma según tus necesidades y las de tu familia.En segundo lugar, un punto crucial es tomar decisiones sobre las comodidades de la casa. ¿Prefieres una ducha o una bañera? ¿Necesitas una cocina más grande? ¿Cómo puedes aprovechar al máximo la luz natural? Responder a estas preguntas te permitirá definir con precisión los cambios que necesitas.Además, uno de los primeros pasos al planificar tu reforma es realizar un croquis de la distribución de tu casa después de la reforma. Este dibujo te ayudará a visualizar el resultado final y a evitar que los equipos de trabajo se interfieran entre sí. Puedes empezar haciéndolo a mano alzada y luego pasarlo al limpio con medidas reales. Recuerda que este paso inicial te podrá ahorrar tiempo y permitirte ir ajustando los detalles a lo largo del proceso.Por último, ten en cuenta que cada reforma tiene sus particularidades. Debes considerar las necesidades individuales de cada miembro de tu familia y tratar de acomodarlas en la medida de lo posible. Por ejemplo, si a uno de tus hijos le gustaría tener su propio espacio, tal vez quieras incluir una habitación extra.